El mismo adquirió varias armas y posteriormente las comercializó posiblemente a facciones delictivas
En horas de la noche de este lunes 30 de agosto del corriente 2021 la justicia uruguaya envió a la cárcel a un efectivo policial perteneciente a la Jefatura de Rivera.
Según información periodística que posee el equipo de A Plateia en español integrantes de la Dirección de Investigaciones de la Jefatura de Policía de Rivera tras un trabajo de inteligencia policial realizado obtuvieron la información que en una vivienda ubicada en barrio Villa Sonia estarían guardando armas de fuego la que probablemente tendrían como destino alguna de las facciones delictivas que desde hace unos años delinquen en la frontera Rivera – Livramento.
Tras la información obtenida, los investigadores uruguayos alertaron a sus pares de la Policía brasilera respecto a un individuo que no sería ajeno al hecho, el cuál en la jornada del pasado viernes 27 de agosto fue detenido en la ciudad de Santana Do Livramento – Brasil, portando una pistola Glock 9 milímetros.
Posteriormente las autoridades policiales uruguayas pudieron establecer que la pistola incautada en territorio brasilero había sido comprada por parte del efectivo policial uruguayo de iníciales C.J.S., de 40 años de edad, el cual también había comprado en una armería de la ciudad de Rivera 3 pistolas 9 milímetros, 1 escopeta y más de 2000 municiones.
Con la información obtenida, en primera instancia los integrantes de la Dirección de Investigaciones de la Jefatura de Policía de Rivera realizaron un allanamiento en una casa de barrio Villa Sonia, deteniendo a u hombre de 21 años de edad donde constataron en el patio del fondo, enterrado en el piso de tierra, envuelto con una prenda de tela floreada y en una bolsa de nylon, dos trozos grandes de sustancia marihuana, envueltos con nylon y cinta color amarillo, de sustancia marihuana pesando 540 gramos, tras lo cual el individuo de 21 años fue condenado por un delito de tráfico internacional de armas de fuego, un delito de contrabando y un delito de asistencia a los agentes de la actividad delictiva, a cumplir 18 meses de prisión efectiva.
Tras las actuaciones realizadas se llevó a cabo también la instancia judicial en la cual la Justicia uruguaya condenó a 20 meses de prisión al efectivo policial de 40 años de edad, tipificándole como autor responsable de un delito interno de armas de fuego en régimen de reiteración real, con reiterados delitos de tráfico internacional de armas de fuego.
